Sala de prensa

La investigación se inició el pasado 21 de enero cuando el Servicio de Vigilancia Aduanera de la provincia de Cádiz detectó un paquete procedente de China cuyo destinatario era un ciudadano afincado en la localidad de Chiclana de la Frontera. En el interior del mismo había pequeñas bolsas de plástico con monedas de dos euros y, tras realizar las primeras inspecciones, comprobaron que se trataba de monedas falsas de alta calidad.

Conceptos como adornos de metal o de decoración para evitar el control

A los pocos días, se tuvo conocimiento de que el mismo destinatario iba a recibir otros tres envíos de las mismas características y con la misma dirección de origen, por lo que se procedió inmediatamente a su incautación.

Los investigadores descubrieron que el destinatario de los paquetes los recibía bajo conceptos como adornos de metal, decoración o artículos de adorno para intentar eludir así los controles aduaneros y no levantar sospechas ante una posible investigación sobre su actividad delictiva.

Vendedor ambulante de ropa en mercadillos

Avanzadas las pesquisas, los investigadores pudieron constatar que este varón tenía como actividad profesional la venta ambulante en mercadillos, por lo que tendría un conducto fácil para colocar estas monedas falsas a los clientes al dar el cambio de la compra de sus artículos.

Por todo ello, se solicitó una entrada y registro en su domicilio de Chiclana de la Frontera -Cádiz- donde se localizaron algunas monedas de un euro y de dos euros falsas. Posteriormente, en una nave de un familiar ubicada en la misma localidad se intervino otro paquete que había recibido el día 20 de enero. A lo largo de toda la investigación se ha logrado la incautación de 10.000 monedas falsas de valor facial de dos euros contenidas en cinco paquetes de 2.000 monedas cada uno. Finalmente este varón fue detenido y pasó a disposición de la autoridad judicial como presunto responsable de un delito de falsificación de moneda.