CIENCIA
POLICIAL
28
eran los principales usuarios, si bien esto ha de cambiar dado que el
devenir del tiempo y la amplitud de utilidades ha supuesto una rápida
expansión del uso en la población adulta. Otro cambio necesario es que
dejen de ser consideradas como dañinas para los jóvenes y catalogadas
como un simple factor de riesgo de autólisis, ya que si bien es cierto
que un mal uso puede derivar en un incremento del peligro, también
suponen un punto de encuentro que bien empleado puede servir para
combatir la conducta suicida, tal y como señalan López Martínez y Ca-
rretero García (2022) en su
Guía práctica de prevención de la autolesión
y el suicidio en entornos digitales
.
4.1
Redes sociales y salud mental
trastornos mentales y en conductas suicidas (Molero Alonso
et al.
, 2021).
4.2
Políticas con respecto al suicidio de las principales
compañías propietarias de redes sociales
•
Meta: Facebook, Instagram y Whatsapp. Cuenta con una página
de soporte en la que ofrece indicaciones para las personas que
detecten publicaciones de terceros sobre suicidio o autolesiones,
además facilita teléfonos de ayuda y solicitudes de formularios
con recursos que pueden ser enviados a la persona en riesgo.
En caso de peligro inminente, recomienda que se contacte con
las autoridades locales de emergencias y, en el resto, pide que
se reporte a la propia compañía para encargarse de contactar y
ofrecer apoyo (Meta, 2022).
•
Alphabet: Google y Youtube. Por un lado, cuenta con una página
destinada a atender la conducta suicida y, por otro, no permite la
publicación de contenidos destinados a su promoción (Ayuda de