Ansar Ghazwatul Hind: el grupo de Al Qaeda en Jammu y Cachemira
85
Después del martirio de Zakir Musa, alega Lelhari, una agencia de
Pakistán se puso en contacto con nosotros. Los paquistaníes ofrecieron
un acuerdo de armas a cambio de la reunión de AGH con algunas condi-
ciones. La primera condición era que AGH no actuaría sin el permiso de
la agencia. En segundo lugar, ninguna acción sería grande e impactante.
El nuevo emir de AGH continúa afirmando que esta agencia paquis-
taní debe haber pensado, erróneamente, que el grupo podría conver-
tirse en una «marioneta» del Estado después de la muerte de Musa.
Pero las condiciones ofrecidas solo muestran cuán esclavizada y débil
se ha hecho nuestra yihad.
Por lo tanto, argumenta Lelhari, los yihadistas no pueden perma-
necer en silencio, de lo contrario no solo serán responsables del fin de
esta yihad, sino que también se convertirán en sus culpables. Dice que
la misión debería ser mantener firme esta yihad contrarrestando la
conspiración para ponerle fin.
Con esa mentalidad, Lelhari ofrece tres objetivos. En primer lugar,
los muyahidines deberían esforzarse puramente sólo para establecer
la Ley de Alá en la Tierra de Alá. Este ha sido el mantra de AGH desde
que se estableció en 2017. Musa empleó repetidamente el lema «
sharía
o martirio» para enfatizar su compromiso con una visión ideológica
para la lucha de Cachemira.
En segundo lugar, Lelhari dice que todas las operaciones militares
deben llevarse a cabo sobre la base de las decisiones tomadas por los
comandantes de la Cachemira ocupada y estas decisiones se tomarían
solo en interés de la yihad y teniendo en cuenta las realidades del
terreno. Esto tiene la intención de subvertir la autoridad de Pakistán
sobre el conflicto.
En tercer lugar, el líder de AGH pide la unidad entre las filas de los
militantes en Jammu y Cachemira. Dice que a los intereses de la yihad
se les debe dar prioridad sobre los intereses organizativos y persona-
les y que no se debe permitir que esta yihad sea explotada por ningún
país o agencia.
Lelhari termina su discurso diciendo que, si todos los luchadores de
diferentes grupos están de acuerdo en estos puntos, entonces se debe
establecer un consejo
shura
, de tal manera que dos muyahidines re-